100 entradas en SaltandoTrenes

Durante el tiempo de duración del Master en Marketing Online y E-commerce que cursé, el blog me ayudó a practicar y comprender los conocimientos adquiridos, profundizar en cuestiones que no entendía y poner en práctica aplicaciones y herramientas en mi propia página a modo de banco de experimentos, algo que hoy día continúo haciendo. Todo esto me supuso que en el momento de elaborar el proyecto fin de master prácticamente no me supusiera un gran esfuerzo, lo fui trabajando a diario.

Es una fuente de trabajo innegable. Me ha abierto nuevas posibilidades de cooperación en proyectos con otras personas que no conocía, me ha puesto en contacto con gente maravillosa y en la actualidad me está suministrando trabajos que de otro modo difícilmente hubiera accedido a ellos. No digo con esto que la bandeja de entrada de mi correo esté a rebosar de solicitudes de mis servicios, pero sí es verdad que contactan conmigo tras conocer mis trabajos, mi curriculum y mi blog y actualmente tengo la suerte de decir que tengo más trabajo del que puedo realizar. Indiscutíblemente mi blog se ha convertido en un medio estupendo de demostrar mis conocimientos trabajando en lo que más me gusta.

Parece una chorrada, pero te obliga a ejercitar tu creatividad. Pienso que todos somos creativos y que es algo que también se puede trabajar. Enfrentarte cada nuevo post ante una hoja en blanco es un reto, y a mí los retos me van 🙂

Del mismo modo que leer te permite mejorar tu vocabulario y conocimientos en gramática, escribir también. Y esto es algo que también se trabaja, ahora escribo más rápido y mejor (si es que se puede decir que escribo bien) solo con leer mis primeras entradas me da una vergüenza enorme, ahí es dónde noto mi evolución.

Actualmente estoy embarcado en dos proyectos que me ocupan muchísimas horas del día. Aunque la verdad esto no es excusa, siempre he sido una persona muy ocupada, incluso en la época de desempleo el día se me quedaba corto.

Por esta razón no dedico a mi blog todo el trabajo y el tiempo que entiendo que necesitaría para que se acerque a lo que espero de él. Así que después de casi medio año desde de que me plantease un profundo rediseño en mi blog, aún sigue prácticamente como al principio, feo, plano y soso. Esta procastinación severa tampoco me preocupa demasiado porque pienso que lo importante en mi blog es el contenido, pero siempre un cambio y la atracción visual de diseño es importante.

Me gustaría publicar más post a la semana. La solución es fácil, pues hazlo ¿no? El caso es que después de 100 artículos no he conseguido un propósito que me planteé; publicar mis post en una hora. Realmente me está resultando difícil. Hay veces que aunque tengo claro de lo que voy a hablar y cómo plantearlo, no consigo hacerlo en el tiempo fijado. En ocasiones tengo listo un post en 40 minutos y en otras se me van más de 5 o 6 horas. Es verdad que mis post suelen superar las mil palabras y que trato de aportar buenas fuentes, imágenes y vídeos, por esta razón me lleva tanto esfuerzo, esfuerzo que no me permite publicar en menos de una hora y más de una vez por semana. Una cosa sí que he conseguido, a día de hoy no me ha quedado ningún miércoles por publicar, sin excepción.

Monetizar mi blog también es una tarea pendiente. Aunque de forma indirecta lo está haciendo con oportunidades de trabajo, no tengo estrategias para objetivos monetarios en él. Realmente mis objetivos actuales los está cumpliendo, como es ser mi mejor carta de presentación profesional.

Me gustaría experimentar en él campañas de Adwords para ver que tal se comporta en SEM, pero volvemos a lo mismo, con el tiempo que dispongo he de priorizar y hoy por hoy este propósito no está en el top 5 de mis prioridades diarias.

Un blog consume tiempo, y a no ser que seas Seth Godín escribir algo que merezca la pena te llevará tiempo y este es un bien escaso que a menudo se suele obviar. Pero a la misma vez yo sí encuentro en este esfuerzo una recompensa. No te mentiré, casi todos los meses me planteo dejarlo, por no decir que mi familia no entiende cómo puedo sacrificar mi tiempo libre para algo que «no me deja dinero», pero no me quiero traicionar a mí mismo, aunque no es tangible directamente sí me está sirviendo profesionalmente y me aporta otras satisfacciones.

Espero que para final de este año mi blog tenga la imagen y el diseño que quiero, ese es mi objetivo a medio plazo y lo cumpliré.

Pongo el punto final a este post agradeciéndoles a mi familia la paciencia y la comprensión que tienen conmigo cuando no solo sacrifico mi tiempo libre, sino el suyo también. Siento deciros que no lo dejaré, al menos de momento 🙂 Sorry!!

Ahora si te ha gustado mi entrada y te identificas conmigo, ¿a qué esperas?, ¡comparte!