En marketing online puedes poner en práctica muchas formas de llegar a tus clientes para lanzarles un mensaje original que active tus ventas; Social Media, Mail Marketing, Blogs, CpC, SEO on page…pero en realidad el único valor seguro es el contenido de calidad.
Con todas esas estrategias online todo el que trabaja en la mercadotecnia trata de alcanzar una meta por encima de todos los objetivos que se plantee en sus proyectos profesionales: ser el primero de la fila, que cuando alguien piense en nuestros productos o servicios seamos los primeros en llegar a nuestros potenciales clientes, lo que habrás escuchado por visibilidad en buscadores.
Pero olvidamos que ese escenario dónde actuamos para cautivar a nuestra audiencia es un escaparate gigantesco. Es un ente privado que controla el planeta de la información, hablo de Google claro.
Estamos sencillamente en manos de unas cuantas mentes que deciden cómo ha de funcionar su teatro (los famosos algoritmos de rastreo) y sus decisiones no siempre obedecen a cuestiones motivadas por una razón de peso. Ocurre que los que estamos al otro lado no podemos preveer cuales van a ser las reglas del juego en un futuro a medio plazo, si cambiarán sus criterios de funcionamiento o si por contra puedes estar optimizando tu web en línea a esas «reglas del juego» de forma permanente en el tiempo.
A los buscadores en general y a Google en particular no les hace mucha gracia que los SEO traten de esquivar sus filtros para colarse en el primer puesto de su buscador aprovechando las grietas de su sistema sin entrar por el aro de sus criterios. Me temo que esta es una de de las razones por las que constantemente cambian sus algoritmos de rastreo, que vienen a ser algo así como los criterios en los que se basan para ordenar las webs.
Este cambio constante en los dichosos algoritmos tiene unas consecuencias desagradables para aquellos que trabajan en el mundo online optimizando webs para buscadores ya que todos los esfuerzos empleados en trabajar el posicionamiento y en hacer lo que Google nos dice pueden caer en saco roto por el cambio de alguno de estos algoritmos.
Cómo puedo acertar con Google sin volverme loco
Entonces ¿como puedo trabajar el posicionamiento de mi web sin riesgos? Fácil, con el contenido. Lo habrás escuchado un montón de veces incluso si no perteneces al sector del marketing. Pero este contenido del que hablo no puede ser cualquier contenido, ha de ser contenido contenido orinal.
No se trata de escribir reseñas, noticias frías o artículos que solo te interesan a ti,
El contenido del bueno es el que hará que el peso de tu página engorde y se mantenga siempre robusto.
Ha de ser contenido que no pase de moda, que vuelvas a leer pasado un tiempo y siga teniendo valor. Cada vez hay más contenido en la web y de mayor calidad, por lo que ya no basta solo con publicar contenido bueno. Realmente este factor del contenido es el que cumple con el único deseo de Google (después de ganar más y más pasta por supuesto); que tu web posicione porque ofrece algo genial que la gente está buscando.
¿Cómo puedo elaborar contenido de calidad?
- Post en tu blog para solucionar problemas que pueda tener tu audiencia.
- Guías, tutoriales, trucos…
- Explicaciones sobre cómo funcionan tus productos y cómo sacarle máximo partido.
- Apartado FAQ´s en tu web.
- PDF´s, WhitePaper o libros electrónicos.
- Fotografías, además tienes plataformas específicas para publicar este contenido como Instagram o Pinterest.
- Vídeos y presentaciones.
- Esquemas, programas, diapositivas en SlideShare.
- Audios embebidos. Los podcast cada vez son más consumidos con esto de los smartphones.
- Buenas descripciones de las fichas de tus productos en tu e-commerce. ¡Eso también es contenido!
¿Qué efectos produce en tu web el buen contenido?
- Te aseguras visitas de calidad, estas visitas suelen ser personas que verdaderamente están interesados en lo que vendes.
- Aumenta el tiempo de permanencia de cada visita en tu web. Algo que influye positivamente en tu SEO.
- Te posiciona como un experto en tu sector sin decir que lo eres.
- Fidelizas a tu audiencia y ganarás suscriptores a tu newsletter. Lo que hace que te asegures un buen número de visitas recurrentes.
- Te permitirán poner en marcha campañas de fidelización de clientes para estrategias de venta cruzada.
De este modo siempre serás del gusto de Google. Podrán cambiar constantemente todos sus algoritmos, pero nunca la razón de su existencia, que su buscador ofrezca los mejores resultados posibles según la consulta introducida y para ello el contenido es un valor seguro.
Eso sí, generar contenido requiere emplear muchos recursos y sus efectos no los apreciarás hasta pasado algún tiempo, pero funciona.
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