Si has decidido emprender por internet para promocionar tus servicios o productos has dado el primer paso y ya no puedes fallar. No hay vuelta atrás el avión ya ha despegado y los reactores están a tope.
Has llegado al momento de la verdad y no puedes fallar, son en estos momentos donde has de dar lo máximo de ti mismo, tu futuro está en juego y gran parte del éxito en tu futuro negocio va a depender de la reputación que te labres con estos primeros clientes, porque necesitas de ellos que a partir de ahora se conviertan en tus mejores prescriptores.
La naturaleza de tu negocio online ha de ser la venta, captación y promoción de tus servicios y como segundo objetivo la fidelización.
Fíjate que hablo de servicios, porque si tienes una ecommerce y vendes producto, además de promoción y venta tendrás que incluir el proceso de fidelización en estos canales.
En los servicios online, y más concretamente en servicios que tienen que ver con el asesoramiento o aquellos que suponen un contacto frecuente con el cliente, voy a proponerte algunos consejos para que tu futuro siga siendo exitoso, fidelices a estos y captes otros nuevos.
Desvirtualiza a tus primeros clientes
Tu promoción ya ha concluido, han contactado contigo y están dispuestos a confiar en ti, ahora lo mejor que puedes hacer es desvirtualizarlos y quitarte de encima cuanto antes el filtro de frialdad que supone una relación online.
Has de establecer con estos primeros clientes una relación de empatía y establecer lazos y canales de confianza. Han de percibir que tu compromiso es absoluto. Por eso te recomiendo, que en la medida de lo posible, te conozcan personalmente.
El sentido de la vista es por suerte o desgracia el rey del ser humano, esta muy vinculado a los estados de ánimo y rige al resto de los sentidos que todos conocemos, si te gusta la trilogía del señor de los anillos es como el anillo único que gobierna al resto.
Por eso la importancia que esta adquiriendo el formato audiovisual como mejor forma de conectar y transmitir un mensaje. La fotografía y el vídeo lo preferimos antes que el texto porque este lleva implícito el esfuerzo de la lectura/comprensión.
Pues igual ocurre con nuestras relaciones personales y también profesionales, aunque no lo queramos reconocer prejuzgamos por el aspecto del que tenemos enfrente, su forma de vestir, su tono de voz, su expresión corporal…todo eso junto es lo que nos lleva a decir con mucha frecuencia eso de «que bien me cae este chaval».
Trata de transmitir todo lo que te hace bueno en tu trabajo y que en definitiva repercutirá en la confianza que depositen en ti.
Trabaja más duro, más fuerte y mejor
Siempre más. Tienes que devanarte los sesos para que estos clientes queden satisfechos y finalmente se conviertan en tus mejores vendedores.
Mirales a los ojos y háblales con la misma seguridad y confianza que tienes en ti mismo, nunca engañes. Y aquí la palabra nunca es totalmente absoluta.
Da más de lo que percibirás, consigue que las expectativas que depositó en ti estén muy por debajo de lo percibido. Pero con elegancia también has de saber transmitir que en este momento estás comenzando y que tus honorarios no son los que le estás empleando, acota en el tiempo estas primeras tarifas económicas.
Regala extras, cosas que ellos no te pidieron pero que tu sabes que necesitan, verán que eres un profesional como la copa de un pino, pero si haces este tipo de trabajos hazlo saber, incluye ese trabajo en tu factura y hazle un descuento del 100%.
Sobre todo, y esto no lo hagas jamás, nunca bajes la calidad de tu servicio. Es muy frecuente que los nuevos negocios empiezan de esta forma que te indico. No escatiman en detalles y en calidad, sin embargo cuando obtienen una cuota de clientes considerable no pueden atender del mismo modo que lo hacían antes.
Nunca permitas que eso te ocurra, si afortunadamente tu cartera de clientes ha crecido invierte los recursos necesarios para atenderles de igual forma que al principio. Si tienes que invertir hazlo, pero nunca escatimes en lo que un día empezó a darte de comer, calidad compromiso y confianza.
Con esta entrada pretendo hacerte ver que tus primeros clientes son ahora tus nuevos jefes. Si estás comenzando a trabajar tu cartera de cuentas, mímalos desde el principio este es el comienzo de tu futuro y depende más que nunca de ofrecer un servicio excelente, solo con su ayuda podrás llegar lejos.
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